Muchas veces se confunde hambre con ansiedad, sobre todo el fin de semana... y caemos en la tentación de comer por aburrimiento.
Aquí te mostramos varias estrategias para evitarlo.
1. Identificar si es hambre o solo ganas de comer: el ansioso come todo el día y pasa mirando el reloj, para ver cuánto falta para la próxima comida.
2. No saltearse el desayuno y que este sea completo; es decir, que incluya lácteos, algún pan o galleta integral y fruta.
3. Realizar cuatro comidas diarias ➕ dos colaciones. Evitarás sentir hambre y comer de todo en la siguiente comida.
4. Buscar alguna distracción como caminar, leer, etc. Realizar distintas actividades, ayuda a disminuir la ansiedad.
5. Evita tener alimentos que te tienten a la vista y siempre ten a mano algunos saludables como frutas, yogurt, frutas secas, etc.
Y recuerda: siempre trata de hacer elecciones inteligentes en tu alimentación.
Lic. Analia DelgadoNutricionista
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