Tener las uñas perfectas no es fácil: el trabajo, la cocina, las tareas del hogar pueden arruinar en un segundo, meses de mantenimiento. Las uñas para que resistan la tarea diaria, tienen que estar duras y sanas; así les será más fácil protegerse de los choques exteriores.
Usar guantes es una ayuda increíble para las personas que trabajan habitualmente con las manos mojadas o con productos tóxicos.
Actualmente en el mercado hay infinidad de marcas y modelos de guantes que protegen las manos, sin que después de quitártelos se te queden arrugadas y las uñas demasiado blandas. De todas maneras, si usas guantes durante muchas horas, aplícate siempre dos capas de esmalte protector.
Las uñas crecen en promedio, un milímetro por semana (el doble que las de los pies). Su composición consta de capas de proteína muerta, unidas por grasa corporal y humedad. Si conseguimos que esta mezcla esté sana, estarán más fuertes y más bonitas.
Mantener una dieta inadecuada mucho tiempo, prescindir de cierto tipo de alimentos, sufrir enfermedades; puede hacer que las uñas crezcan muy lentamente, débiles y en muchos casos, bastante quebradizas.
La carencia del mineral zinc en nuestro organismo, conlleva a que las uñas están blandas y aparezcan manchas blanquecinas. Nuestro organismo asimila mejor este mineral si es de origen animal (carne, pescado, yema de huevo, hígado, mariscos), pero no debes renunciar por eso al de origen vegetal (algas, legumbres, productos integrales, hongos).
Además, tener reservas de este mineral en nuestro cuerpo, nos ayuda a controlar entre otras cosas el acné, la pérdida de cabello y el cansancio corporal.
Comuna Mujer