¿Te has puesto alguna vez un traje de chaqueta para ir a una entrevista o para una ocasión especial, en la que tu intención era arreglarte, pero al mirarte al espejo, has exclamado:
“¡Parezco mayor!”?
Esto no sólo es aplicable para las mujeres mayores que no proyectan (digamos que) su mejor imagen, queriendo aparentar menos edad con atuendos que ni las veinteañeras llevarían, sino también para las chicas jóvenes, que se empeñan en parecer mayores, con estilismos que nos las benefician o maquillándose en exceso, oscureciendo demasiado sus rostros jóvenes.
Llega una determinada etapa en nuestras vidas, que intentamos vestirnos para parecer más jóvenes… pero,
¿cuál es la línea que separa el estilo favorecedor acorde a la edad, de un look absurdo?Se dice que si tienes más de cuarenta años, ya no tienes edad para usar ciertas prendas como la minifalda o vestidos ajustados; pero todo es adecuado al tipo de mujer.
Según el estilo de cada una, hay que buscar un look acorde no sólo a las tendencias, sino también a nuestra personalidad. De esta forma, crearemos un
look armonioso.
Lo fundamental para lograrlo, es conocer nuestro cuerpo: qué partes podemos potenciar… hasta dónde mostrar y cómo.
Se puede usar perfectamente un vestido ajustado, pero, porque sea ajustado no quiere decir que se enseñe todo: un vestido a la rodilla o justo por encima de ésta, con un escote sutil (no muy exagerado), entallado (pero que nos deje respirar) y de un color discreto, te aportará elegancia y feminidad, sin que parezca que intentas imitar a una adolescente.
Cada edad tiene su momento para experimentar en cuanto a ropa y colores… pero recuerda siempre sentirte cómoda y bien con lo que usas. Esta es la clave para irradiar una buena imagen, acorde a nuestra edad.
www.femenino.info