La actitud es la disposición para enfrentar las circunstancias de la vida, sean éstas buenas o malas. Tu actitud es tan poderosa, que puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso.
¿Por qué? Porque lo que pienses de ti misma, afecta tu propia actitud y la actitud con que los demás te tratan. Como tú te percibes, es como te perciben los demás.
Por eso si tú te quieres, aceptas tu cuerpo, te valoras, vas a brillar más allá de la ropa que tengas puesta. La actitud es un valor agregado fundamental. No existen Diosas Carnales… las Diosas verdaderas, son aquellas que irradian su fuerza, su gracia, su actitud desde el interior. Aprende a conocerte, a encontrarte, a descubrirte.
¿Cuántas veces nos quejamos que los demás no nos valoran como debieran? Tal vez seas tú la que no se valora. La mayoría del tiempo somos nosotras, las primeras en pensar que valemos menos como personas, amigas, profesionales, pareja, etc. Nuestra autoestima y confianza se ven minadas por nuestra actitud negativa.