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Ideas erróneas respecto al consumo de marihuana

Ideas erróneas respecto al consumo de marihuana
Hay una creencia popular sostenida que la marihuana es una droga segura; entendiéndose que no produce adicción y que no trae consecuencias derivadas de su consumo. Frente al tema de la posible legalización de su consumo, creo que es bueno recordar y tener presente, que hay muchas ideas erróneas respecto de éste; siendo válidas tanto para la marihuana, como para otras drogas. Esto genera el riesgo que las personas se manejen de forma inadecuada, por falta de información al respecto.

Si bien a corto plazo, puede decirse que hay drogas menos dañinas que otras, no existe droga que no sea dañina en absoluto. Merece aclarar este punto porque si no, parecería que lo “menos malo”, pasaría a ser “bueno”... y esto no es así.

Partiendo de la base que su centro de acción es el cerebro, especialmente los centros cerebrales superiores que afectan la conciencia, pueden ya hacerse una idea de que estamos jugando en terreno peligroso. Es muy importante saber que la marihuana es  liberadora de dopamina, un neurotrasmisor interviniente en varias de las enfermedades mentales.  

¿Qué quiero decir con esto? Ninguna persona conoce a ciencia cierta, cuáles son sus predisposiciones genéticas para padecer determinadas enfermedades mentales y el consumo de cualquier tipo de drogas, incluida la marihuana, puede disparar dicha predisposición.

Como psicóloga no puedo dejar de advertir sobre este punto en particular, ya que atiendo en consulta muchos casos de personas con trastornos de ansiedad y depresión, y muchos de ellos aparecieron como secundarios al consumo prolongado de marihuana. Así también, es cierto que he atendido gente que alguna vez consumió por curiosidad u ocasionalmente y no sufrió consecuencias de ningún tipo. Pero nada es seguro cuando hablamos de drogas.

Nunca podemos saber "a priori", lo que puede generar el consumo de una sustancia en cada uno de nosotros; pero tenemos que ser concientes que no sirve el ejemplo ajeno: aquello que a otros parece “no hacerles nada”, no es aplicable ni se puede generalizar... porque cada persona es diferente en su constitución genética y sin duda, también lo es en su personalidad.

Esto último también, juega un papel importantísimo. Hay características personales que hacen mucho más vulnerables de llegar a ser adictos, a algunos individuos más que a otros.

Entre los diferentes individuos, existe diferencia en la predisposición a ser o no un adicto en potencia. Y eso tampoco lo sabemos antes de consumir. Esto puede variar y ciertas personas pueden pasar en poco tiempo, a ser fácilmente adictas al consumo; mientras que otras, necesitan mucho más tiempo, según su vulnerabilidad previa.

La marihuana primeramente, genera en muchos individuos dependencia psicológica: no debemos olvidar que la mayor parte de la gente que la consume, es porque quiere generar un efecto que sin ella no lo logra (euforia, placer, pérdida de temores, relajarse, bajar el nivel de conciencia, etc.), por lo que va a buscar consumir cada vez que lo desee, para sentirse bajo ese efecto. Esto hace que algunas personas que empezaron como consumidores ocasionales, pasen luego a ser habituales.

Esto se genera, porque el individuo no desarrolla por sí solo el aprendizaje de habilidades que lo lleven a sentirse bien, sino que necesita la droga para esto. Además, tiene la idea que con la droga es más sencillo y rápido y que no tiene de qué preocuparse (basado en la falsa creencia de que es inofensiva). Es así que consume cada vez más seguido, cuando desea sentirse de esa forma. Aunque su organismo no la necesita, la persona sí tiene el deseo de sentirse de una determinada manera.

En general, empieza a pasar que cada vez son más las situaciones en las que se recurre a ella. Se da lo que en psicología llamamos “generalización de la conducta”; y así, casi “sin darse cuenta”, la persona termina siendo consumidora habitual. Es la forma que encontró para resolver sus problemas: pierde el miedo, se relaja, se anima, se siente contenta... todo “gracias” al consumo de marihuana. Se da una asociación inmediata de la droga y el efecto que se desea.

Con el tiempo de uso prolongado, está comprobado que pasa a generar tolerancia y entonces, se necesita más consumo para obtener el mismo efecto. Y allí ya estamos frente a una adicción orgánica, que se generó con el tiempo y la creencia errónea de que no es adictiva. Por eso, la realidad es que en un principio genera más comúnmente adicción psicológica y con el uso a largo plazo continuado, termina además, generando adicción orgánica.

Además de los efectos deseados, genera otros indeseados: dificultades cognitivas, de memoria, de concentración, etc. Incluso muchas veces no genera tampoco los efectos deseados, porque depende de otras variables que no son solamente la sustancia (estado previo en que se encuentra el individuo, características personales, lugar, situación, etc.). Y en vez de obtener efectos positivos, pasan a sentirse peor, con irritabilidad, paranoia, etc.

Si bien la persona que consume cada tanto, no suele sentir síntomas de abstinencia, no es algo que se pueda tomar como indicador de nada seguro a futuro, ya que estos pueden aparecer si empieza tarde o temprano a incrementar su uso a largo plazo.

La abstinencia puede variar de un individuo a otro; pero en general los síntomas son irritabilidad, dificultades para dormir, ansiedad, desasosiego, disminución del apetito, deseos por la droga, entre otros.

Estos síntomas se ven en los grandes consumidores de marihuana, al otro día de dejar de consumir y tiene su pico máximo, a los tres días. Recién empiezan a disminuir en intensidad, a las dos semanas de no consumir.

Está comprobado por ejemplo, que hijos de alcohólicos, son mucho más propensos a ser rápidamente adictos al alcohol si beben, que hijos de no alcohólicos; ésto, porque traen esta información en sus genes en forma de predisposición. Lo mismo con las sustancias, en donde intervienen además de estos factores, otros que los predisponen aún más (como los relacionados a la personalidad, que anteriormente mencioné).

Son muchas las causas por las cuales una persona consume y termina siendo adicto... no me voy a detener en esas variables en este articulo porque sería demasiado extenso. En lo que quiero centrarme, es en las creencias erróneas que se tienen a respecto del uso de marihuana, como inofensivo o como solución al consumo de otras drogas.
 
Otra idea equivocada entre la gente que consume marihuana, se da entre quienes son consumidores sociales o de fin de semana: piensan que no tienen peligro de caer en adicción, porque pueden pasar perfectamente una semana sin su consumo y no sienten ninguna necesidad de ésta.

Lo que ignoran es que el THC, que es el principio activo del cannabis, tiene una vida media aproximada de una semana (hasta dos); lo que significa que en una semana, el individuo no ha conseguido eliminar más que el 50%. Por lo que una persona que aunque sólo consuma los fines de semana, no tendrá tiempo suficiente que se elimine completamente y se irá acumulando en su cerebro, produciendo varios de sus efectos indeseables.

La persona confunde la duración del tiempo de acción de la marihuana, porque la asocia al efecto buscado al consumirla, que se va mucho más rápidamente (pocas horas). Pero esto no quiere decir que la droga no siga actuando en su organismo, a otros niveles que no percibe. Por eso, estas personas consumidoras de fin de semana, no están a salvo de nada si lo hacen a largo plazo.

Por eso la adicción a sustancias es un gran problema, sea de lo que sea. Siempre predispone a problemas mayores a futuro. Las personas empiezan a consumir para sentirse mejor y luego no pueden dejar, porque se sienten mucho peor, con lo cual añadieron un problema más a su existencia. El pasaje de drogas “blandas a duras”, es por demás conocido. Cuando aceptamos las “blandas”, estamos también dando el puntapié inicial para que luego vengan las demás. Escuchamos quienes dicen equivocadamente que es preferible que consuman marihuana a otras drogas, pero esto no es solución al problema de base.

No caigamos en la creencia errónea de que un mal subsana otro mal, porque no es así: dos males, no hacen un bien.

Son innumerables los factores que intervienen en el consumo de drogas: desde las variables que llevan a los individuos a consumir, hasta los intereses económicos que entran en juego... cómo afecta y perjudica a la persona, familia y sociedad.

Por eso, estoy convencida que la mejor postura es educar en las consecuencias y potenciales peligros que tiene el consumo de sustancias, sean las que sean... que la persona sepa cuáles son los riesgos que está tomando al consumir. La ignorancia es la que los hace más propensos a actuar sin responsabilidad. Para quienes lo iban a ver como una opción posible, no dejen de ser concientes de su peligro.

La marihuana no es alternativa de nada, ni recreativa, ni un medio para relajarse o perder el temor, etc... porque nunca sabemos si algo que empieza como inofensivo, se puede transformar a la larga, en un problema mayor: somos humanos y como tales, vulnerables.

El uso de drogas, nos quita la posibilidad de desarrollar por nosotros mismos, estrategias para resolver nuestros problemas y encima, puede agregarnos otro. El gran tema es apuntar a educar más sobre todas ellas, como forma también, de prevención de consumo a futuro.

La ignorancia no sólo nos hace esclavos, sino también nos hace esperar que la solución venga de los demás. En cambio, el conocimiento nos da la opción de ser responsables de nuestro accionar y por ende, más libres.


Ps. Silvia Cardozo

ensil@adinet.com.uy
Terapeuta Cognitivo-Conductual
Técnico en Sexología Clínica
Integrante, Coordinadora y Docente de Suatec (Soc. Uruguaya de Análisis y Terapia del Comportamiento)
Teléfono del consultorio: 2 707 90 27  

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Comentarios (5)

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Adriana Rodriguez 22-09-2012

Hay que tener en cuenta lo del autocultivo que está sobre la mesa de opinión, dado que cuando se cultiva en hidroponia o en los hogares, la planta aumenta la concentración del THC a un 20% dado que la planta no se poliniza. Ojo con lo banal del autocultivo para uso personal!!!

Comuna Mujer 08-09-2012

Gracias, Adriana por tu comentario! Como siempre les decimos: su aporte es muy valioso. Te mandamos un beso grande.

Adriana Rodriguez 07-09-2012

Gracias Silvia, está muy correcta tu información y debemos saberla. La solución al problema no es así de simple con la legalización. Hay que tener un plan para el tratamiento y sobre todo la prevención.

Comuna Mujer 06-09-2012

Muchas gracias por tu aporte, Victoria. Todas las opiniones tienen su espacio en nuestro sitio. Te mandamos un beso.

Victoria 06-09-2012

Estoy totalmente de acuerdo con el articulo. Y vale aclarar que a nivel farmacéutico es una droga muy potente ya que atraviesa la barrera hematoencefálica, muy fácilmente. También su concentración en el cerebro es 3-6 veces más alta que en la sangre. Nadie que promocione la salud puede estar de acuerdo en legalizarla.

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