¿Cuántas veces compartimos la comida con nuestra familia sin interesarnos por lo que cada uno tiene para contar? Muchas veces buscamos en el exterior aquellas cosas que nos puedan sorprender, cuando en realidad; cada uno de nuestros familiares puede asombrarnos, incluso con detalles... pero para esto es necesario estar realmente curiosos por el otro,
escucharlo en el presente; es decir, recibirlo como si existiera sólo en ese momento, liberándonos por unos minutos de la ilusión de que ya los conocemos.
Hoy simplemente quiero proponer que intentemos cultivar esta actitud, que aprovechemos
cada interacción como si fuera una llegada a un lugar nuevo.
Podemos hacerlo con nuestros hermanos, amigos, pareja, hijos; escucharlos atentamente sin categorías previas, como si nos estuvieran hablando en un idioma que no entendemos del todo, preguntándonos por ejemplo: "¿a qué se referirá esta persona con esa palabra?" "¿qué significará para él esto que me dice?
Interesarnos curiosamente y con el corazón, puede ser una gran experiencia para nosotros y una linda forma de entregar amor.Stefanella Costa Cordella
Psicóloga UDP. Diplomada en psicodiagnóstico infantil UC y en terapia evolutiva con niños y adolescentes U. de Chile. Postítulo en psicoterapia psicoanalítica infanto juvenil.
Actualmente residente en Italia, cursando Master en Neuropsicología en la Universitá Cattolica di Milano y haciendo la formación en Psicoterapia Corporal de la Scuola Italiana di Biosistémica.
"Desde el comienzo de mi carrera me ha interesado el trabajo con niños y adolescentes, el cual he desarrollado en contextos hospitalarios, comunitarios y educacionales; ésto complementado con el trabajo psicoterapéutico en la consulta con los niños y sus familias.
Me apasiona aprender y enriquecer cada día, los modelos de comprensión del ser humano y desde ahí poder acompañar a otros a que se observen a sí mismos, y descubran sus infinitos recursos y potencialidades."