No hay una solución mágica para cada problema, pero sí podemos poner en marcha estrategias que nos ayuden a resolver nuestras preocupaciones de la mejor manera posible. Veamos en primer lugar qué tipo de preocupaciones podemos tener:
• Preocupaciones sobre conflictos con otras personas o sobre reparaciones que necesita nuestra casa. Este tipo de problemas son muy inmediatos y, dado que son atajables, podemos poner en marcha estrategias de solución de problemas. Para ello, a grandes rasgos:
1. Tenemos que prestar atención al problema, asumiendo que los problemas son parte de la vida diaria y que es importante sentirnos capaces de hacerles frente, así como procurar no responder de manera impulsiva.
2. Es importante especificar qué influye en él y qué soluciones se nos ocurren para hacerle frente, sean o no disparatadas podemos contemplar todo en primera instancia: la cantidad de ideas, genera calidad.
3. Debemos tomar decisiones en relación a las alternativas de solución que se nos han ocurrido, valorando pros y contras, tanto a nivel emocional como de tiempo y esfuerzo.
4. Una vez que hayamos tomado la decisión más sensata, debemos ponerla en práctica. Si no resulta ser una buena solución, repetiremos el proceso.
• Otro tipo de problemas o preocupaciones sobre cuestiones inmediatas que no son modificables… por ejemplo, la enfermedad de un ser querido o el estado del mundo. En este punto tendremos que poner en marcha estrategias de autocontrol o de reevaluación positiva, por ejemplo.
• Preocupaciones irracionales como que llegue el fin del mundo o que podamos caer gravemente enfermos de repente, no se basan en una realidad demasiado probable. Por ello se plantea que una posibilidad de “descatastrofizar”, es razonando los argumentos que desmontan estos pensamientos, de modo que veamos que son poco probables.
En cualquier caso, es importante que llevemos en nuestra mente la idea de que no hay nada permanente y que la vida en sí misma es muy cambiante. Debemos abogar porque transciendan los aprendizajes y no los errores o las tristezas. No podemos detenernos a ahogarnos, sino seguir nadando para avanzar y no perdernos ningún paisaje.www.lamenteesmaravillosa.com