Son muy utilizadas por los deportistas de alto nivel para mejorar su fuerza, la eficacia de sus movimientos y el rendimiento deportivo; pero también, están alcanzando mucho éxito entre las personas que comienzan a practicar ejercicio.
Los deportistas de más nivel, también las utilizan por las razones antes mencionadas. Estas máquinas, ejercen unas vibraciones en el cuerpo que estimulan el sistema nervioso y éste, actua rápidamente sobre las fibras musculares para coordinar la contracción y relajación.
El entrenamiento con plataformas vibratorias no debe durar más de diez minutos y es importante comenzar con sesiones de adaptación progresivas; es decir, por cada tanda de un minuto de estímulo hay que hacer un minuto de reposo. Los resultados para la salud son excelentes.
De hecho, el origen de las plataformas vibratorias proviene nada más y nada menos que de la medicina aeronáutica y espacial. Es que gracias a ellas, se logró reducir la pérdida de masa ósea y muscular que la ingravidez de las estaciones espaciales provocaba en los astronautas.
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