Regala tu ausencia y tu indiferencia a quien no te valore; pero no de cualquier forma, auséntate emocionalmente. No lo hagas como una forma de venganza, sino como una manera de protegerte.
Tenemos que darnos cuenta de que con el tiempo, la imagen que tenemos de las personas, puede cambiar… lo que implica que desconoceremos a aquellos que creíamos conocer.
A veces nos percatamos demasiado tarde de que todo lo que hemos hecho por alguien, ha sido ignorado o menospreciado en el terreno emocional. Es posible que entonces, nos sintamos decepcionados y que nos demos cuenta de que no han movido ni un dedo por nosotros.
Conseguir que lo que alguien haga o no haga no nos afecte, actúa como un bálsamo. Puede que resulte costoso al principio, pero los resultados comienzan a notarse bien pronto en nuestra salud emocional.
De hecho, cuando somos capaces de hacerlo, nos damos cuenta de que es un verdadero placer poder escucharnos, sin nada que enturbie nuestro diálogo interior.
La verdad es que intentarlo no solo merece la pena… ¡merece la alegría!
www.lamenteesmaravillosa.com