Si hasta ahora te has criticado, ¿Qué pasaría si comenzaras a pensar diferente de ti?
Te pregunto (y me pregunto)...
¿Qué ves cuando te ves?
¿Eres capaz de verte con ojos nuevos?
¿Qué te dirías a ti misma?
¿A dónde quieres llegar?
¿Cómo te proyectas?
¿Dónde te ves de aquí a un año?
¿Eres capaz de hacer las paces con el espejo?
Ahora te invito -y me invito-, a vernos desde una perspectiva más compasiva, y no hablo aquí de una mirada conformista, sino de un ver para entender.
No se trata de una propuesta narcisista tampoco, sí podríamos decir que es un camino del medio, sin críticas y sin juzgamientos, con la inocencia de no condenarte y una visión amplia y benevolente hacia ti misma.
Probemos de hacer una nueva ronda de respuestas a las preguntas anteriores y permitamos que la reflexión compasiva nos devuelva un reflejo fortalecido.