Me gustaría compartir con ustedes algunos tips que han resultado beneficiosos, tanto para mí como para otras personas, para trabajar en el camino de encontrar la felicidad.
Una actitud proactiva frente a la vida. Para eso es necesario salir del lugar de seudo comodidad y moverse hacia a la vida con sus pros y sus contras. Empezar a generar endorfinas, no sólo comiendo chocolate. Los estímulos externos, como pueden ser el alcohol o las drogas, puede que hoy se disfruten... o que nos diviertan, pero luego traen consecuencias desfavorables. Cuando sólo se busca la satisfacción en el hoy, parecería ser como si el mañana no existiera. ¿Pero qué pasa cuando el mañana es hoy?
Tampoco pueden vivir en el futuro: “voy a disfrutar cuando: me jubile, me reciba, tenga más tiempo"... y yo les pregunto: ¿y hoy? La idea es ser feliz hoy y mañana. La felicidad es un momento, no un estado.
Los pensamientos son muy importantes. He tenido la posibilidad de hablar con muchas personas y comprobar que cada uno de nosotros carga con su propio "paquetito". Por ésto, la idea no es negar lo malo: es necesario saber cuál es problema para poder superarlo. Pero así como esto es importante, también lo es ver lo que sí es bueno... y si no lo hay: empezar a generarlo, empezar a tener una actitud pro-activa.
Por ejemplo si nadie me sonríe, puedo empezar a sonreír yo y van a ver como esta cadena se transforma en sonrisas múltiples. Es cierto que la felicidad empieza por dentro, sin embargo podemos empezar desde afuera, ya que todo lo que hagamos repercutirá en nuestro interior.
Arreglarnos, actuar como si ya fuéramos felices, hará que empecemos a ser felices.
Las personas felices, como dije anteriormente, no es que tengan más momentos buenos que malos, sino que se focalizan en los buenos momentos.
Reconozco que hay cosas como la muerte, una separación inevitable, pero también les voy a contar que estos episodios para nada agradables, pueden transformarse en un “despertar” a la vida: empezar a valorar lo que tenemos y descubrir cualidades que teníamos dentro nuestro, pero que no sabíamos.
El ser feliz depende de cada uno de nosotros. Es un trabajo del día a día, un trabajo para disfrutar, donde todo es posible... depende de que creas en ti y tengas una o varias metas. Nada es inalcanzable. Te aconsejo dividir la meta en pequeñas metas, para dar pasos cortos y certeros; y ya de paso, lograrás grandes o pequeñas gratificaciones en el camino.
La vida es el camino hacia tus metas. ¡Puedes ser feliz!
Viviana Vaisenberg
Terapeuta Cognitiva Comportamental