Las artes, como toda expresión no verbal, favorecen la exploración, expresión y comunicación de aspectos de los que no somos conscientes. Trabajar las emociones a través de la arteterapia, mejora la calidad de las relaciones humanas porque se centra en el factor emocional, esencial en todo ser humano, ayudándonos a ser más conscientes de aspectos oscuros y facilitando, de este modo, el desarrollo de la persona.
Es imposible que podamos ser conscientes racionalmente o linealmente de todas las actividades y de toda información que tenemos a nuestro alrededor. Cuando conducimos, por ejemplo, la atención primaria está orientada a la actividad central: mirar adelante y controlar coche, pero a la vez, inconscientemente, escuchamos el ruido del motor, cambiamos de marcha, pensamos en aspectos del pasado o futuro.
Para simplificar en el pensamiento consciente hay tres mecanismos creativos fundamentales para organizar la información y experiencia: filtrar, generalizar y distorsionar. Estos mecanismos reducen la información, priorizando, excluyendo, tomando decisiones y son la base de todo aprendizaje.
Los mecanismos que organizan la información, son la base para entender de dónde surgen nuestras emociones. Si filtramos solo la información negativa de todo lo que nos pasa, probablemente estos mecanismos nos puedan llevar a experimentar estados ansiosos. Si por el contrario, filtramos de forma más ajustada y realizando menos generalizaciones en el ámbito personal, sería más fácil que lleguemos a experimenta emociones sanas, tanto negativas como positivas.
A través del arte, potenciamos nuestra capacidad de comunicación no verbal. El arte nos puede ayudar a expresar y comunicar sentimientos, facilitando la reflexión, la comunicación y posibles cambios en la conducta. La arteterapia es un tipo de ayuda que utiliza el arte como una vía terapéutica para mejorar posibles afectaciones psicológicas, especialmente las que tienen que ver con la ansiedad: en este sentido, el arte puede ser una vía estupenda para canalizarla.
Pero, además del impacto terapéutico que pudiera tener, la arteterapia es una técnica de desarrollo personal, de autoconocimiento y de expresión emocional. Por tanto, no es necesario poseer ningún trastorno psicológico, sino simplemente sentir la necesidad de explorarnos a través del arte y comenzar a trabajar las emociones.
La arteterapia se entrena y fortalece permitiendo:
• expresar sentimientos difíciles de hablar, proveyendo de este modo, una vía de comunicación
• tener una expresión verbal más accesible
• incrementar la autoestima y la confianza.
“La educación emocional es la habilidad de escuchar casi cualquier cosa, sin perder tus estribos y tu autoestima”. - Robert Frost -