Quizás sea momento de decidir si quieres seguir viviendo tu vida tal cual está o prefieres comenzar a moverte de esa supuesta comodidad que te mantiene atascada, inactiva.
Escúchate, acepta lo que tienes que aceptar, cree, confía.
Muchas veces nos cuesta aceptar las situaciones tal cual son e intentamos adornarlas, matizarlas, excusarlas… pero si prestamos atención, siempre tendremos nuestra luz interior que nos guía y nos muestra la realidad como es... y esto trae consigo malestar, incertidumbres y hasta angustias, quizás.
Aunque la sensación sea incómoda, dale la bienvenida... aunque moleste o duela, recíbela en tu vida: gracias a ella, es que te moverás.
Si no te llega la incomodidad, no querrás avanzar.
Autora: Marisan