Inicio Contacto Suscribirse

Seguinos en:

Home / Calidad de Vida / Todo lo que debe saber sobre los lentes de sol

Todo lo que debe saber sobre los lentes de sol

Todo lo que debe saber sobre los lentes de sol

Las gafas o lentes de sol, son mucho más que un complemento de moda del vestuario: protegen nuestros ojos y evitan daños ocasionados por el astro rey, que pueden llegar a ser realmente graves.

Se han convertido en un objeto indispensable para el día a día, sobre todo en verano.

De ahí la importancia de su uso, cuya finalidad (más allá del elemento estético), radica en proteger los ojos de las radiaciones ultravioleta, disminuir la probabilidad de deslumbramiento y amortiguar la luminosidad solar.

Las exposiciones solares sin protección, unidas al cloro de las piscinas y el agua del mar, favorecen la aparición de afecciones como la conjuntivitis, las cataratas o las queratitis. Estas patologías, junto con las infecciones oculares típicas, se incrementan en torno a un 20% durante la época estival.

Por consiguiente, la elección de sus lentes no debe basarse en modas o criterios estéticos, sino en el uso que se les dará. Por ello, la calidad del filtro solar, es esencial.
Usar gafas de mala calidad, es más perjudicial que no llevar nada ante los ojos.
Para la montura dejaremos nuestros gustos y optaremos por la que más nos favorezca.

Al bloquear parte de la radiación visible, las gafas reducen la fatiga ocular y mejoran la percepción visual.
La transmitancia, es la proporción de luz que deja pasar la gafa de sol a través del cristal. No se puede definir de forma objetiva, que un filtro más oscuro sea mejor que otro más claro; porque la percepción del usuario depende de la luz en el ambiente y de su sensibilidad ocular. Pero, tan importante como limitar la luz visible, es bloquear los dañinos rayos ultravioleta.
La radiación que emite el sol, incluye un amplio espectro de frecuencias. Pero, las que realmente son esenciales para la vida en la tierra, son sólo una pequeña parte del total: la radiación ultravioleta (UV), la luz visible y la radiación infrarroja (IR).

Los rayos ultravioleta, no son visibles para el ojo humano. Se dividen en:

- UVC: la capa de ozono los detiene. En la actualidad, el deterioro de la misma, permite que más cantidad de esta radiación, nos alcance (con el consiguiente peligro que supone).

- UVB: capaces de producir dolorosas quemaduras en la córnea. El cristalino del ojo las detiene, impidiendo que penetren.

- UVA: son los más peligrosos. Atraviesan la córnea y también el cristalino, alcanzando la retina, la cual pueden llegar a dañar.

 

Factores de riesgo de la exposición solar

El riesgo varía con:

- La altitud: a mayor altitud, menos atmósfera para protegernos y por tanto, más radiación.

- La latitud: cuanto más cerca del ecuador, mayor peligro. Además, el agujero en la capa de ozono, especialmente el localizado en torno al Polo Sur, incrementa considerablemente el riesgo en las regiones antárticas, a pesar de su distancia al ecuador.

- La estación: en el hemisferio sur, el riesgo mayor es en diciembre y enero.

- La hora: entre las 10:00 y las 14:00 hs., se concentra el máximo de radiación.

- La nubosidad: las nubes no nos protegen, ya que dejan pasar el 90% de la radiación ultravioleta. Es un error pensar que podemos prescindir de los lentes de sol, un día de verano sólo porque está nublado y la luz molesta menos.

- El entorno: la radiación se incrementa en un 20% en la arena, un 30% en el agua y un 90% en la nieve.

- La edad: resultan especialmente vulnerables los ojos de los niños, ya que su cristalino es casi transparente hasta los diez o doce años y sus ojos absorben toda la radiación. Por ello, no es recomendable que usen gafas de sol de juguete: la exposición solar sin protección visual, puede llegar a provocar lesiones en la córnea, la retina y el cristalino.

 

Un color para cada necesidad

Generalmente sucede que el usuario tiene la convicción, que el cristal oscuro proporciona una mayor protección. Esto no tiene por qué  ser así, ya que hay lentes blancas o con cristal claro, que pueden filtrar el 100% de los rayos.

Más allá de modas y cuestiones estéticas, el color de sus lentes indica para qué actividades son más adecuadas unas gafas.

Marrón: para filtrar las radiaciones azules. Aumenta el contraste y la profundidad de campo y es ideal para los deportes al aire libre, ya que produce un efecto relajante. Indicado en caso de miopía.

Verde: permite una percepción de los colores con muy pocas alteraciones. Reduce la luz visible sin interferir con la claridad de visión. Especial para deportes náuticos. Recomendado para casos de hipermetropía.

Amarillo: mejora el contraste en días nubosos, brumosos y con niebla. No se recomienda su uso para conducir en días soleados, ya que puede provocar errores en la percepción de las luces rojas y verdes de los semáforos.

Gris: permite su uso continuado en el tiempo, ya que transmite uniformemente la luz a través del espectro y respeta mejor los colores naturales. Recomendado para conducir.

Naranja: no es apto para uso solar. Aumenta el contraste, más aún que el color amarillo y es el más adecuado para situaciones en que el cielo está encapotado. Proporciona el mayor contraste, cuando se dan situaciones de baja luminosidad y es un filtro eficiente para la luz azul. Es el color idóneo en condiciones de baja luminosidad, como la conducción nocturna o con niebla, ya que aumenta los niveles de contraste.

 

Grados de absorción de los filtros

Filtros fotocromáticos: responden a la intensidad de la luz ultravioleta, cambiando su tonalidad de clara a oscura (se oscurecen con el sol y se aclaran en la oscuridad). Aconsejable para frecuentes entradas y salidas de interior a exterior.

Filtros isocromáticos: son de un solo color y reducen significativamente la radiación UVA.

Filtros espejeados: reflejan gran parte de la luz, impidiendo que llegue al ojo. Ofrecen una protección máxima frente al UVA, por lo que son recomendados en ambientes deslumbrantes como la nieve, el esquí, la escalada, el mar (especialmente los espejos oscuros). Su inconveniente: se rayan fácilmente.

Filtros polarizados: su misión consiste en impedir el paso a cantidades desiguales de las distintas radiaciones y deja penetrar tan solo la luz útil. Gracias a este componente, no se modifican negativamente los colores y contrastes. Entonces, minimizan los deslumbramientos, ya que eliminan los reflejos de ciertos ángulos de superficies, como el agua la nieve o la arena y permiten una visión más nítida. Por tanto, son muy útiles para trabajos sobre superficies reflectantes, la pesca, practicar deportes acuáticos, esquiar, conducir…

Filtros con antirreflejo: neutralizan las reflexiones de los rayos que pasan por los lados de las gafas.

 

Cuando vaya a adquirir lentes de sol, le recomendamos tener en cuenta los siguientes puntos (ya que la salud visual está en juego):

• La adquisición de las gafas de sol debe estar supervisada por un especialista de la visión.

• Elija la gafa más adecuada al uso preferente que se les va a dar, sea playa, montaña, deporte, conducción, etc.

• Las lentes degradadas protegen más en la parte superior del cristal que en la inferior: así permiten mirar a un horizonte luminoso y leer objetos poco iluminados, sin quitarse las gafas.

• La gafa de sol ideal debe ser neutra desde el punto de vista óptico, cubrir de frente y lateralmente de los rayos nocivos, tener un alto grado de protección contra los rayos ultravioleta, ausencia de rugosidades y bordes vivos, con cristales u orgánicas (nunca de plástico).

• Se recomienda el uso de gafas de sol homologadas y garantizadas, que cumplan con las normas de calidad óptica imprescindibles, para la correcta protección ocular.

• Además de hacer frente a las radiaciones solares, unas gafas deben permitir una óptima agudeza visual.

• No se deje engañar por el color de las lentes. Algunas lentes blancas filtran el 100% de la radiación UV, mientras que otras muy oscuras no filtran correctamente la luz UVA pero sí la visible; favoreciendo una mayor dilatación pupilar y, como consecuencia, un incremento de la radiación UVA que recibe el ojo. Por ejemplo, las lentes correctoras, pueden ser tratadas de modo que filtren el ultravioleta y sin embargo, sean incoloras (transparentes a la luz visible).

• Para que la lente solar proteja de forma adecuada, debe estar perfectamente adaptada al rostro: la montura no debe quedar ni descentrada, ni alejada de la cara.

• Los daños que provocan unas gafas inadecuadas no aparecen enseguida, sino después de algunos años y en la mayoría de los casos, las lesiones son irreversibles.

• Algunos dolores intensos de cabeza y fotofobias anormales (intolerancia y temor anormal a la luz), también están producidos directamente por la utilización de gafas de sol, que no disponen de los filtros adecuados para evitar el paso de la radiación ultravioleta a los ojos.

• En cualquier caso, existen cinco categorías de filtros para todas las lentes oftalmológicas según el grado de filtración. Estas llevan una numeración desde 0 para la luminosidad solar muy baja (siendo éstas, las únicas aconsejadas para la conducción nocturna), hasta 4, que es la más oscura o fuerte.

• Un filtro solar mal elegido o gafas sin filtro, también llamadas "de falsa protección", son altamente dañinas para la salud del ojo. Con estas gafas se restringe la cantidad de luz que llega a la vista. Como consecuencia, la pupila se dilata más y la radiación que le llega, es mayor.

• Por otra parte, es aconsejable que la gafa sea cerrada lateralmente. De esta forma cubre el ojo de frente y por el lateral. Este diseño es muy recomendado en la montaña nevada y en lugares donde se refleje altamente la luz.

• Por todas estas razones al comprar unas gafas de sol, el consumidor debe interesarse por su calidad filtrante y protectora. Los cristales deben bloquear del 99 al 100% de las radiaciones ultravioletas.

Esta información sobre el porcentaje, aparecerá en el etiquetado o en el folleto informativo, junto con el nombre y la dirección del fabricante y otros datos de interés: instrucciones de almacenamiento, uso, limpieza y mantenimiento o desinfección aconsejados.

Esperamos que esta nota les sea de utilidad. Todos tenemos conocimiento que los lentes comprados en ópticas y lugares autorizados, resultan muchas veces un tanto costosos… pero cada persona, debe poner precio a su salud.

Comuna Mujer

 

Contenido relacionado

Calidad de Vida

Consejos para mantener sus ojos sanos

Datos epidemiológicos recientemente publicados por Susan Vitale y colaboradores en la revista Archives of Ophthalmology de Estados Unidos demuestran que la prevalencia de la miopía –dificultad para ver objetos distantes- se incrementa en este país. La tendencia se corresponde en otros países en todo el mundo, haciendo que los oftalmólogos se pregunten qué podría estar causando esta disminución en la visión.

Salud

Problemas comunes de visión

Los problemas de visión más comunes son los errores de refracción, conocidos más comúnmente como vista corta (miopía), hipermetropía, astigmatismo y presbicia. La mayoría de las personas tiene una o más de estas enfermedades.

Comentarios (2)

Agregar un comentario

Comuna Mujer 19-01-2011

Muchas gracias, Sara! Siempre nos gusta saber que nuestras notas les son de utilidad.
Te mandamos un beso grande y gracias por escribirnos.

Sara 18-01-2011

Excelente artículo, muy completo!

Mostrando: 2 de 2