* Hay que tomarse un tiempo para elegir y no dejarse llevar por las prisas. El primer “golpe de nariz”, no sirve para hacernos una idea de cuál es la sutileza y profundidad del perfume; por lo que es mejor, que nos lo apliquemos y dejemos pasar un espacio de tiempo. Una jornada de compras en un centro comercial, es un buen momento: podemos probar y volver más tarde con la decisión ya más madura.
* A la hora de probar un perfume, debemos aplicarlo en nuestra piel. Los cartoncitos están bien para hacernos una idea, pero hasta que no fundamos nuestro propio olor con el perfume, no sabremos cómo resulta. Pondremos una gota sobre la cara interior de nuestra muñeca y en el pliegue del codo, oliéndolos al menos diez minutos después de la aplicación.
Nos comenta Andrea Cuello:
“al probar una fragancia en la piel jamás se debe de frotar, porque se rompe la cadena de fijación de la misma, hay que aplicarla y dejar que se evapore el alcohol, para que se abran las notas de inicio, luego de corazón y por ultimo las de base que son las maderas. A diario, durante mi trabajo con maquillaje, tratamiento y perfumería con productos de lujo, veo como las personas se frotan las muñecas cada vez que se les prueba una fragancia y luego dicen que no les fija, que no es para su piel...con este tip que les brindo podrán perfumarse correctamente y la fragancia les perdurará y rendirá mucho más. Hay tantas cosas que inciden en la fijación, el grado de PH que tenga la piel, medicaciones que se tomen, dietas, la falta de eliminación de toxinas del cuerpo por falta de ejercicio o por tomar poca agua, en fin, es muy amplio el tema y yo me apasiono enseguida”. * Piensa en qué ocasiones vas a utilizarlo: no es lo mismo un perfume para salir por la noche, que un aroma para ir a la oficina. Recuerda que la máxima de “menos es más”, también se aplica en este terreno, y que quizá quienes pasan el día entero junto a nosotras, agradezcan un aroma suave y fresco.
* Pide consejo a alguien cercano y estudia su reacción al oler el perfume en tu piel. Es un buen punto de partida para saber si nos estamos equivocando.
* Nuestro olor es la primera impresión que los demás tendrán de nosotros, y nos acompañará durante todo el día; de manera que
no es conveniente abusar de perfumes demasiado recargados. En ese caso, lo mejor es ser muy cautas con la cantidad. Algunas esencias necesitan tan solo dos gotas para resplandecer sin agobiar.
* Si vamos a regalar perfumes, intentemos tener una referencia de los gustos de la persona a la que queremos sorprender. Es mejor regalar esa marca a la que es fiel, que atrevernos con otras nuevas. Si lo hacemos, pidamos ticket regalo para facilitar las cosas en caso que no sea de su gusto.
Y tengamos en cuenta, que
una buena idea para que la esencia nos acompañe por más tiempo, es aplicarla en las zonas donde se sienten los “latidos”:
cuello, nuca, pliegues del codo, muñecas y detrás del lóbulo de las orejas.
Para terminar con esta pequeña guía, les contaré que a lo largo de mi vida he tenido no más de cuatro fragancias que realmente he usado de manera continua, y cada una de ellas, durante varios años seguidos en exclusiva. Una vez que doy con el aroma adecuado, me cuesta mucho cambiar.
En todo caso, lo más importante a tener en cuenta, es que al escoger una fragancia, debemos sentirnos cómodas y seguras con ella, ya que el perfume habla por sí mismo de nuestra personalidad. De esa forma, estaremos listas para seducir con nuestro aroma.Sabesloquequieres y Comuna Mujer.
Le agradecemos a
Andrea Cuello, maquilladora y seguidora de Comuna Mujer, por su aporte para la nota.