Muchas salsas de tomate, tienen una cantidad de azúcares importante y esto asombra, ya que no es un alimento dulce en sí mismo… pero en realidad lo es, ya que se le agrega mucha cantidad de azúcar para conservarlo. Además, con este ingrediente, se evita que la salsa se sienta ácida.
Como siempre privilegiamos lo natural y lo hecho en casa, la mejor opción es hacer salsa casera natural y consumirla en el momento o al día siguiente: así te asegurarás un producto fresco y sin más añadidos que el tomate, que es lo que realmente necesitamos.
Como nota extra, les podemos contar que otras salsas comerciales como la mostaza o el ketchup, también contienen azúcar.
Si quieres darle un toque de condimento extra a tus platos, puedes optar por las especias: una forma muy saludable de aderezar tus comidas.