Cada pareja, decidirá si quiere intentar retomar la relación o no; sabiendo que uno de los pilares más importantes,
la confianza, se ha perdido. La misma se construye con el correr del tiempo y
se destruye en segundos.
No permitas que tu pareja te culpe por el engaño. “Me desatendiste” o “es que tú estás siempre desarreglada/o”… frases de este estilo son un clásico para hacer sentir al otro culpable por la infidelidad.
Si tu pareja te vió desarreglada/o, podría haber hablado contigo de ir juntos a un gimnasio... o regalarte una prenda que le gustara para que te vieras bien y cosas así.Si decides darle una oportunidad, en
primer lugar quien engañó,
debe reconocer que es el responsable. Como también entender que
tu cambio de actitud, no se debe a que “te guste pelar” o te guste “tener esa cara”, sino que
es consecuencia de su comportamiento.
Quien engañó tiene que hacerse responsable de lo que hizo. Admitirlo, sin detalles, ya que éstos no suman, sino que restan.
Lo segundo que debe hacer es pedir perdón... pero un perdón desde el corazón, un perdón sincero, con un cese de la relación extramatrimonial, sin derecho a reclamar por malas caras y permitiendo al otro, el tiempo necesario para adaptarse.
Tercero, lo sucedido no habilita a quien sufrió la traición, a rebajar o castigar al otro. Puedes estar enojado o enojada, tener sospechas, pero nada más... y esto si decides quedarte en esa relación: también puedes optar por terminarla.
Si decides terminar, hay situaciones que debes atravesar. Una de ellas es transitar por un
duelo... sentir y aceptar la pérdida de esa persona, que se siente hasta en el cuerpo, que te lastima, que no te deja dormir, que te hace daño. Una vez que superes esta pérdida, dejará
una cicatriz, claro está.
Debes APRENDER.
Vale aclarar que transitar un duelo es normal y conlleva
tristeza. Si ves que caes en depresión ósea: que ya nada te importa, no tienes ganas de hacer nada, subes o bajas de peso y sobre todo, atacas a tu estima, es decir que la "bronca" se vuelve hacia tu persona, en ese caso, consulta a un profesional. La Depresión es una enfermedad y puedes salir de ella. Estar triste es una cosa y atacar tu estima, es otra.
También te aconsejo
no generalizar: “todos los hombres/mujeres son iguales”. No es cierto que siempre te choques con el mismo tipo de personas, sino que
tú te fijas en hombres o mujeres con características similares... que ya sabes que vas terminar sufriendo. Por algo te resultan atractivas: puede ser por una carencia, por ejemplo... piensas que eres débil y que necesitas alguien que te cuide y buscas a ese macho recio, que “parece” que te fuera a cuidar, cuando no es así.
Entonces abre tus ojos y ve las señales para no repetir la historia. Si sales con él o ella y hace algo que no esté de acuerdo a tus valores, ¿por qué salir otra vez? Sin embargo, vemos como la persona vuelve a salir. Si tú ves esas características donde es probable repetir la historia, te aconsejo cortarla antes que empiece.
Continúas saliendo por ¿miedo a la soledad? Tal vez estando solo o sola, puedas aprovechar para tomar ese curso que no hiciste mientras estabas en pareja, ver a una amiga o amigo que hacía tiempo que no veías...
empieza a estar bien contigo y así lo estarás con los demás.
También escucho: “no entiendo por qué me engañó, si yo le di todo lo que me pidió”. APRENDER. Una cosa es hacer acuerdos y cada uno ceder un poco de su espacio, otra es dejar de ser quien uno es y convertirse en lo que piensa que al otro le va a gustar, alejándose así de la propia esencia.
Sumisión: eso aleja, no acerca. Lo que acerca es la admiración por el otro, que es muy distinto a ser servil en todo, sin pedir nada a cambio. Muchas personas con baja autoestima, dan mucho en cantidad... tanto de cosas materiales, como en acciones por el otro... compensando o creyendo que compensan, lo que les falta en cualidades.
No tienes nada que compensar: ¡empieza a valorarte! Quiérete y luego, podrás estar en pareja. ¿Entiendes que te engañó o te dejó, porque te habías convertido en una persona aburrida, que no querías salir o que gritabas todo el tiempo? Pues trabaja eso: no para estar con otro, ya que no es lindo ir enojado por la vida... trabaja eso, para ti.
Aprende.
Si te pasa muchas veces lo mismo, es porque no has aprendido la lección y sigues repitiendo el patrón.
No queremos víctimas, sino personas que aprendan incluso de situaciones que no les gustan. Para lograr separarte mejor: recuerda lo bueno, pero en un principio
recuerda lo malo... es importante que lo/la bajes de ese pedestal y no sufras: por algo terminaste la relación.
Evita el contacto. Es muy difícil olvidar a alguien si mantienes el contacto o te castigas viendo cómo rehace su vida. Si te engañó, gritó, criticó u alguna otra cosa, por más que de afuera no se vea, ten la certeza que
se lo hará a esa nueva persona. Vive, disfruta... no es la última persona en la Tierra.
Espero que este artículo te ayude a seguir adelante... a no culparte y sobre todo, a APRENDER.
Viviana Vaisenberg Terapeuta Cognitiva Comportamental
Página web:
www.terapiaonline.com.uy