Esta teoría es una de mis favoritas... no dejen de mirar con detenimiento la imagen que acompaña esta nota… me parece fascinante.
Ernest Hemingway utilizó esta teoría, para comparar la obra de un escritor con un iceberg. Un iceberg es una gran masa de hielo, de la que sólo asoma a la superficie una muy pequeña parte (que es la que vemos), pero que se sustenta en la inmensidad que permanece debajo del agua.
El escritor debía conocer por tanto, mucho más de la historia que iba a escribir, de lo que finalmente mostraría. Debería concebir la totalidad del iceberg, para construir una historia sólida, escribiendo finalmente sólo la pequeña parte que sobresale del agua, que sería lo que los lectores llegaríamos a conocer. Me resulta inspirador…
La Teoría del Iceberg se ha aplicado además de al literario, a muchos otros ámbitos: el marketing, coaching, recursos humanos, psicología… y es aquí donde me resulta especialmente interesante y donde me quiero detener.
Habitualmente sólo atendemos a aquello que percibimos a simple vista. El resto, lo que lo sustenta, lo que lo justifica, nos pasa inadvertido. El ser humano es complejo por naturaleza: nuestras actitudes, nuestro comportamiento, las cosas que decimos o hacemos… en definitiva, lo que sobresale del agua, atiende a lo realmente importante: a la gran masa de hielo que está por debajo.
No juzguemos a alguien tan sólo por la pequeña parte que está a la vista… no nos quedemos ahí. Miren esta foto... mírenla durante un instante… ¿verdad que hace reflexionar? Los invito a que lo hagan cuando se encuentren ante una situación que no les guste, cuando alguien diga o haga algo que no les parezca correcto, cuando se sientan dolidos o enfadados con una persona… piensen que tan sólo estamos viendo la punta del iceberg, y que únicamente si hacemos el esfuerzo de ponernos el traje de buzo y sumergirnos en la profundidad del océano, podremos llegar a entender.
No le neguemos al otro, la oportunidad de mostrar lo que esconde debajo del agua. Créanme: siempre vale la pena bucear.
y Comuna Mujer