Usa la
etiqueta de información nutricional, para ver la cantidad de sodio en ese alimento. Trata de elegir productos con el 5% o menos del valor diario (DV) de sodio.
Un alimento con el 20% DV o más de sodio, se considera alto en sodio.
Busca alimentos que digan que son bajos en sodio (“low sodium”), con el sodio reducido (“reduced sodium”) o que no tengan sal añadida (“no salt added”).
Compra alimentos bajos en sodio. Compra muchos
vegetales, frutas,
frijoles y arvejas, ya que son naturalmente bajos en sodio. Puedes comprarlos frescos, congelados o secos, ya que todas son buenas opciones.
Cuando compres frutas enlatadas, busca las que vengan empaquetadas en 100% jugo o en agua.
Cuando compres vegetales enlatados y frijoles, elige los que tengan etiquetas que digan bajos en sodio (“low sodium”), con el sodio reducido (“reduced sodium”) o que no tengan sal añadida (“no salt added”).
Compara la cantidad de sodio en alimentos como el pan, las sopas y las comidas congeladas. Escoge las que tengan menos sodio.
Limita el consumo de alimentos procesados, especialmente los alimentos salados, ahumados o curados, como las salchichas, el tocino o los embutidos, fiambres o carnes frías.
Prepara tus comidas con menos sodio.
Si compras comidas enlatadas (como vegetales, frijoles o pescado), selecciona las variedades que sean bajas en sodio. Si usas alimentos enlatados que no son bajos en sodio,
lávalos antes de comer, para quitarles un poco de la sal.
Usa mantequilla sin sal o margarina blanda.
No agregues sal al agua, cuando hagas fideos o arroz.Prueba hierbas y especias nuevas, como el jengibre o el ajo, para darle sabor a los alimentos.Añade más potasio a tu dieta.Comer más potasio puede ayudar a bajar tu presión en la sangre. Algunas buenas fuentes de potasio son las papas, los melones, las bananas, los frijoles y el yogur.
Fuente:
http://www.healthfinder.gov