Las “crisis de pareja”, forman parte de la relación amorosa. Se trata de momentos difíciles, en los que parece tocarse fondo y sobre los que sobrevuela el fantasma de la separación. Es que el conflicto se vive como una amenaza, que abre una fisura en nuestra frágil seguridad emocional. El desenlace dependerá de cómo sepamos afrontar esta crisis que seguramente requiere un cambio de actitud y de enfoque de ambos integrantes de la pareja.
Hoy por hoy, hay muchas mujeres que salen con chicos menores. La mujer se ha vuelto independiente y esto resulta muy seductor para algunos hombres. Ahora ellos también pueden salirse del rol de abastecedores y sentirse cómodos con que la proveedora sea ella.
A veces, las discusiones llevan a que uno o ambos miembros de la pareja, se enojen. El enojo, como cualquier emoción, es sano: lo que hay que ver, es cómo manejamos ese enojo.
Pasan los años y con ellos, parece que la certeza del romance desaparece. Esas mariposas en el estómago, ese balbucear y ruborizarse, ese encontrarse a una misma diciendo “tonterías”… todo eso queda en el recuerdo, como propio de la adolescencia o la primera juventud. Pero ¿qué ocurre si un día descubres que todo vuelve a empezar?
“Son atractivos, interesantes, cautivadores, adinerados… y por encima de todo: ¡solteros! No están dispuestos a volver a fracasar en el amor y por eso, se cierran en banda ante cualquier posibilidad de relación seria." Esta cita de Danielle Steel en su novela "Solteros Tóxicos", define una posible franja de los "solteros inconquistables"... pero no todo se puede reducir tan fácilmente, a estos motivos.
Todas las personas experimentan cierto grado de ansiedad, cuando van a tener relaciones sexuales con alguien... sobre todo, las primeras veces. Es que se trata de una experiencia que deja totalmente expuesto al individuo, tanto física, como emocionalmente.
Terminar una relación de pareja, suele ser un evento y un proceso complejo, a menos que consideremos a las personas como objetos desechables. Si hemos realmente invertido tiempo, energía, sueños, proyectos… el término de la relación será inevitablemente, doloroso.
Lo observo en la consulta: mujeres atractivas, que salen con hombres que, en un principio, estaban muy interesados en la relación y que luego, cuando pasa un tiempo, dejan de estarlo. Como casi no hay motivo aparente para terminar, a los hombres les cuesta saber cómo hacer para romper el vínculo. A veces, simplemente no le llaman más, sin dar ninguna explicación.
Si ustedes me preguntan si es bueno o malo tener una relación online, les diría que el día que me pusiera en jueza, me avergonzaría de mí misma. Puedo sí darles mi opinión...
Son distintas formas de querer controlar los movimientos del otro cuando algo anda mal... hay desconfianza o existe la sospecha que la pareja pueda estar interesada en alguien más. Y en estas conductas de espionaje, el género femenino supera al masculino, aunque no por mayoría abrumadora como podría pensarse: hay hombres que también espían a sus parejas.