Si con frecuencia te juzgas con dureza, es probable que tu autoestima precise mejorar. Aquí es donde está nuestro punto de poder: cuestionar lo aprendido. Darnos cuenta que una creencia no es nunca una realidad. Cualquier opinión hostil que tengamos de nosotras mismas es disfuncional, nos saca energía pero podemos cambiarla.
A pesar de ese estado de calma que nos proporciona nuestra zona de confort, existen ciertos riesgos si optamos por permanecer aferrados a esa sensación seguridad. Uno de los más peligrosos es la imposibilidad de avanzar, de seguir creciendo. De ahí que lo más adecuado sea modificar la relación que tenemos con el hecho de fracasar. El fracaso es sumamente instructivo. La persona que piensa de verdad, aprende tanto de sus fracasos como de sus éxitos.
Hace un tiempo tuve una consultante que tenía muchos problemas: no dormía y se sentía agotada. Estaba irritable, gruñona y amargada... siempre estaba enferma, hasta que un día, hicimos un proceso de trabajo y de amor con ella... y todo cambió. Si bien parecía que la situación estaba igual, ella era distinta.
Me voy a dedicar tanto a quienes están pensando en sus fracasos, como a aquellos que anhelan conseguir o cambiar algo en sus vidas... también a los que en estas épocas piensan en las cosas que les traen frustración, tristeza, dolor. Esa tristeza que ahora sientes al ver que ha pasado el tiempo y aún no has conseguido ciertas cosas que te propusiste, puede ser positiva. "¿Cómo así?" Te lo cuento en la publicación.
Establecer nuestros límites es imprescindible para crear vínculos sanos.
Muchas veces confundimos “poner un límite” con expresar cómo el otro “debe” comportarse. Pero no es nuestro cometido enseñarle a otro adulto cómo comportarse, el autocuidado sí pasa por definir con nosotras mismas qué haremos cuando se invade nuestro espacio personal y actuar en consecuencia.
Hacernos conscientes de este tipo de diálogos internos, constituye un primer gran paso para recobrar el control y evitar una percepción negativa de nosotros mismos o de nuestro contexto.
En la cultura oriental, es común el uso de cuentos a modo de enseñanzas. La interacción alumno-maestro, generalmente planteada a modo de diálogo, de pregunta y respuesta acompañada de enseñanza, coloca al lector como observador pasivo de la situación en la cual el maestro dispensa su sabiduría al alumno. La lectura dejará un mensaje y buscará estimular la reflexión del lector.
En la que respecta a la violencia de género, cada vez hay más estudios bien concebidos sobre la eficacia de los programas de prevención y respuesta. Desde esta perspectiva, los conceptos presentados en esta publicación buscan contribuir a la sensibilización y a la formación en estos temas.
Los problemas en los vínculos, comienzan cuando se cargan de muchos "debería". Muchas veces estamos convencidos que alguien debería ser más cariñoso... o que debería hacer x o y, etc... y así comienza el problema en cualquier relación, no importa si se trata del jefe, un hijo o la pareja.
El inconsciente es como un radar con 360 grados de percepción, y puede percibir las malas y las buenas intenciones a distancia. Así que cuando hay miedo, el temor materializa las malas intenciones, porque es el propio poder creador de uno.